martes, 1 de septiembre de 2009



EL OUTBACK AUSTRALIANO

El Outback es realmente un concepto – Es el corazón, espiritual y físico de esta gigantesca isla; un generador de energía, para una inmensa región casi desértica, que mantiene el alma pionera de este país en el que todavía se puede sentir el placer de ser un explorador.

El Outback (también llamado el Nunca-Nunca, Woop Woop, back of beyond, o back o'Burke) es el interior remoto y semiárido de Australia. Las pocas partes fértiles se utilizan para granjas de ganado vacuno u ovino. Aparte de esta actividad, el turismo y la minería son las principales actividades económicas en esta vasta área alejada del mar. Debido al tamaño del Outback, el valor de su producción ganadera y minera es considerable. Actualmente, en el Outback, todavía viven los aborígenes australianos según sus tradiciones.

Algunos puntos especialmente destacados para visitar en el Outback son:

· Alice Springs

· Ayers Rock (Uluru)

· Coober Pedy

· Devils Marbles

· Kings Canyon (Watarrka)

· The Olgas (Kata Tjuta)

En el siglo XXI, el Outback mantiene en buena medida un halo de aventura y reto a la naturaleza, aunque hoy podemos recorrer los miles de kilómetros de una punta a otra (más de 3.000) por modernas carreteras asfaltadas. Los australianos llaman “The Track” (“La Ruta”) o “la carretera del explorador” a la carretera del Outback. Su verdadero nombre es “Stuart Highway” y fue terminada en 1987; se extiende desde la ciudad de Adelaida, en el sur, hasta el extremo norte de Darwin, y merece la pena recorrerla para sentir el espíritu del desierto australiano.

AYERS ROCK – EL CORAZÓN SAGRADO

En el corazón mismo de Australia se levanta un monolito natural de arenisca roja, que es, desde hace siglos, un lugar sagrado para los aborígenes que aún hoy celebran allí ritos ancestrales. Se le denomina Ayers Rock, o el “Uluru”.

Esta formación rocosa de 9 Km. de diámetro se encuentra a unos 400 Km. al sur de Alice Springs, y es como un enorme corazón rojo que parece vivo en medio del desierto. Ayers Rock, o el Uluru, como lo llaman los aborígenes de la zona, cambia de tono según transcurre el día. Por este motivo los amaneceres y anocheceres en el Uluru son tan espectaculares. Los colores rojos de la roca se funden con tonos ocres, y las grietas y cavidades que tiene, se transforman en figuras y sombras mágicas.

Los aborígenes Anangu, habitantes de estas tierras, lo consideran un lugar sagrado y todavía hoy celebran rituales y ceremonias en honor a sus antepasados, que creen que reposan ahí. Por esta creencia, los Anangu recomiendan a los turistas no escalar la roca, y la hacen respetar.

En la base del Uluru existen grutas y cuevas sagradas para los aborígenes, donde celebran sus rituales, y no permiten que se acceda a ellos ni se tomen fotos. Para ellos, el monolito es un punto de energía cósmica que simboliza a sus antepasados.

En sus alrededores está Katja Tjuta, un conjunto de rocas similares a Ayers Rock. Son rocas con formas de cabezas humanas o huevos enterrados en la tierra, y un atardecer en ellas obliga a hacer unas cuantas fotos.

Un poco más apartado, se encuentra el Kings Canyon, un valle formado hace miles de años, en el que se puede hacer una interesante marcha a pie de 6 Km., bordeando los precipicios del cañón, o sobrevolarlo en helicóptero por unos 30 dólares. Desde el helicóptero se puede observar un enorme cráter, creado hace millones de años por el impacto de un meteorito.

Paisajes irreales y prehistóricos que sirven de culto para el pueblo aborigen, en un país que no dejará de sorprenderte.

· Información tomada de autraliaysusaborigenes.blogspot.com


NUESTROS VIAJES DE TURISMO CULTURAL Y SOSTENIBLE A AUSTRALIA:

http://www.atravesdelatierra.com/es/circuito.php?id=436